El 18 de abril fue el Día del Médico Internista, una efeméride trascendental en la historia de la Medicina Nacional, porque deviene de la fundación de la Sociedad Venezolana de Medicina Interna (SVMI).
Al médico internista también se le conoce como el “Médico del Adulto”, desarrolla los principios y prácticas del arte y ciencia de la Medicina, que dependen de la evaluación detenida y cuidadosa del adulto a la luz de su ecología, historia, síntomas y signos y del estudio de su estructura y función alterada.
Es la visión y atención como un todo del paciente adulto el objetivo principal de la Medicina Interna.
Dilcia Giménez, jefa del servicio de Medicina Interna del Hospital Central Universitario Antonio María Pineda y expresidenta de la Sociedad Venezolana de Medicina Interna, en su capítulo Lara, mencionó que dentro de la institución tienen labor docente y asistencial.
“El médico internista nunca deja de estudiar y es una profesión que no es económicamente atractiva, más bien abnegada. Cuando me dicen que escoja al mejor de mi servicio les respondo “todos”, porque cada uno hace una labor encomiable”, dijo Giménez.
El médico internista es el “director de orquesta” idóneo, sin la pretensión de saber y hacer de todo. Es el médico que se capacita para acercarse a la persona en forma integral.
Dentro de los estatutos de la SVMI establece que es una especialidad dedicada con visión holística, al cuidado integral de la salud de adolescentes y adultos, fundamentada en una sólida formación científica y humanística.
Labor docente-asistencial
Mencionó que, en el caso de los internistas que laboran en el Hospital Central, pero que no pertenecen a la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado como docentes, igual enseñan a sus pupilos porque pasan revista con los residentes, discuten casos clínicos y evalúan la labor de los estudiantes, tanto de pregrado como de postgrado.
Son quienes vigilan la evolución de los pacientes en la hospitalización de hombres y mujeres, así como en cuidados intermedios de agudos y sub-agudos.
“Ahora también tenemos la Unidad de Diabetes que está liderada por los médicos internistas, junto a un gran equipo de especialistas”, explicó Giménez.
El postgrado de Medicina Interna tarda tres años, pero la mayoría realiza una segunda y hasta una tercera sub-especialidad, para dedicarse a un área de la salud, según explicó Giménez.
“Antes de una intervención quirúrgica aquí en el Hospital Central, el médico internista le realiza una evaluación general en la Unidad Preoperatoria”, detalló Giménez.
Asimismo, llevan las consultas externas e interconsultas que le solicitan los colegas de otros servicios.
“El médico internista debe estar actualizado, desde leer las noticias para saber el tipo de paciente que les llegará”, agregó Giménez.
Deberá conocer el entorno familiar, dónde vive el paciente, cuáles son sus hábitos, conocer si en realidad podrá hacer la dieta y comprar los medicamentos que requiere para su tratamiento.
Aprovechó la oportunidad para felicitar a sus colegas porque no han dejado de trabajar en el Hospital por la vocación de servicio hacia sus pacientes.
El XIX Congreso Venezolano de Medicina Interna se realizará del 21 al 24 de mayo en el Hotel Eurobuilding de Caracas, en homenaje al doctor Carlos Alberto Moros Ghersi.
