Este ha sido el peor de los años para el comercio de los repuestos automotrices y, lamentablemente, creo que el que se avecina será peor, porque a nivel oficial no se toman medidas que indiquen lo contrario.
Lo considera así Alí Almao, secretario ejecutivo de la Cámara de Importadores y Distribuidores de Repuestos Automotrices del estado Lara, Cidralara, basándose en los informes que aportan los miembros y dueños de talleres mecánicos.
Explicó que para abastecer los stock en los establecimientos del ramo es necesario disponer de divisas para las importaciones pero, a pesar de todas las gestiones adelantadas no ha habido solución a ese problema.
Almao aporta algunas cifras sobre el tema indicando que el 80 por ciento de los componentes de un vehículo es importado y cada unidad cuenta con entre 12 y 12 mil quinientas partes, o sea que apenas un 20 por ciento es de producción nacional, pero para su elaboración se requiere materia prima procedente de otro país.
A eso hay que agregar el hecho de que ahora en Venezuela hay 99 marcas de vehículos con 1.100 modelos, lo que hace más difícil la comercialización de los repuestos automotrices.
Por otra parte, indica, en el país existen 30 empresas nacionales y 66 transnacionales dedicadas a la elaboración de partes, así como 7 ensambladoras que están produciendo por debajo de su capacidad, también por problemas con la adquisición de divisas.
Alí Almao informa que en el estado Lara y Barquisimeto en particular, hay una gran cantidad de unidades paradas por falta de repuestos, en especial computadoras y rodamientos.
Otro problema que se presenta es el de los vehículos importados, ensamblados en otros países, que no aplican en Venezuela debido a que sus partes son diferentes a las de aquí.
El gobierno no escapa a esa situación por la gran cantidad de unidades, en su mayoría para el transporte colectivo, muchas de las cuales se encuentran inactivas por la imposibilidad para repararlas por falta de repuestos.
Volviendo al tema de las importaciones, Almao recordó que el gobierno exige a los importadores el requisito de no producción en Venezuela, algo cuya tramitación es muy larga y por ende demora la llegada de los artículos, aún cuando se logre obtener las divisas necesarias para las compras en el exterior, donde ya no envían mercancía si antes no se cancelan.
Anuncia para los primeros días del 2015, una asamblea de directivas de la Cámara Nacional de Importadores de Repuestos Automotrices para analizar la situación.
