Economía del país seguirá supeditada al acontecer político

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Un verdadero encuentro por el conocimiento y la reflexión de la realidad nacional, se realizó este martes en el foro Perspectivas Económicas 2013, de la mano de la Cámara Venezolano Americana de Comercio e Industria (Venamcham) con el apoyo del diario EL IMPULSO.

La actividad inició puntualmente a las 8:00 de la mañana, con las palabras del gerente general de la organización, Carlos Tejera, quien, de forma breve, explicó la visión institucional de Venamcham ante los problemas que aquejan al país y sus alternativas de solución.

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En líneas generales, los especialistas en materia económica consideran que el nuevo año estará lleno de retos laborales y económicos. En detalle, la aplicación de la Ley Orgánica del Trabajo tiene algunos vacíos jurídicos que no podrán resolverse por el momento, por cuanto las autoridades están diseñando el reglamento con absoluto secretismo.

La presidenta de la Comisión Laboral de Conindustria, Maryolga Girán, fue una de las ponentes que abordó las perspectivas laborales de 2013, basada en el tema de la justicia social y orden jurídico.

En primera instancia, Girán comentó que el 2012 dejó una vigencia a medias de la Ley Orgánica del Trabajo, así como la aplicación intermitente de la Ley de Costos y Precios Justos.

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“El año pasado también saltó a la luz pública la Ley de Crédito al Sector Manufacturero la cual señala que para acceder a un crédito, las industrias deben solicitar permiso al consejo comunal de la localidad”.
Girán destacó que al cierre de 2012 se registró una contracción de 12% en el parque empresarial. De esta cifra, el 40% lo ocupa el sector industrial.

En materia laboral, son muchas las cargas que deben enfrentar los empresarios pues 128 leyes les impactan de forma directa. “Según Carlos López, vocero del Consejo Superior del Trabajo, entre las metas de este año se encuentra la reestructuración del Ministerio del Trabajo, en aras de que los consejos comunales sean quienes regulen los procesos”.

En este sentido, Girán explicó que las autoridades nacionales tienen como meta instaurar el concepto de justicia social en todas sus instancias.

Incluso, el mismo presidente Chávez señaló el día de la promulgación de la Lottt, que la norma estaba basada en la justicia social.

Según la investigación realizada por la especialista, dentro de este concepto, la igualdad ante la ley es relativa. “Los trabajadores de la empresa privada no son iguales a los trabajadores de las unidades de producción social.

Esa diferenciación entre pobres y ricos, exacerba la lucha de clases sociales”.

Como ejemplo, Girán mostró una sentencia emanada hace un mes por el TSJ donde se evidencia que la justicia social, impulsada por el Gobierno, está por encima del orden jurídico. “El documento que emanó el TSJ decía que el trabajo está hecho para garantizar la mayor suma de felicidad posible. Por ello, a pesar de la que la Constitución indica que no hay leyes retroactivas, el tribunal dijo que se aplicará retroactividad cuando favorezcan a los trabajadores”.

Bajo estas premisas, agregó, son limitadas las posibilidades de que las empresas ganen una querella ante la Inspectoría del Trabajo. “Tenemos que desarrollar una gran capacidad de negociación para lograr entendimiento con los trabajadores. El concepto del cual habla el Ejecutivo, no respetará el orden jurídico”.

Esta situación, lejos de “garantizar la mayor suma de felicidad a la población” propicia la pérdida de la paz social, afecta el Estado de Derecho y la seguridad jurídica.

En este sentido, resulta obligatorio para las empresas centrar sus operaciones en las personas, en su talento humano. “Revisar la misión y visión del trabajo permite que exista un norte definido y que remen todos en la misma dirección”.

Plan de acción

La conferencista ofreció algunas recomendaciones a los empresarios, para asumir de manera efectiva los retos actuales. “El posicionamiento de la empresa frente a los trabajadores es elemento clave para el éxito”.

Girán invitó a los empresarios a cuestionarse sobre las críticas que realizan sus trabajadores. “Tenemos que darle confianza a nuestra gente y tener sensibilidad ante sus problemas”.

Los proyectos y metas de producción deben ser conocidas por todos los actores, en aras de que el equipo pueda dar aportes valiosos. “A veces no se le reconoce al personal los aportes y logros que obtiene en beneficio de la empresa”.

Cumplir con los compromisos con clientes y trabajadores, fue otra de las recomendaciones que ofreció la especialista a todos los asistentes.

2013 será un año de desaceleración

El economista Asdrúbal Oliveros, explicó que en el nuevo año no habrá un boom económico. “La estructura del Socialismo del Siglo XXI es muy frágil, y altamente dependiente de los precios del petróleo. Por tanto, todo parece indicar que este será un año de desaceleración”.

A juicio del especialista, este es un año para ser conservadores en las inversiones y gastos. “La verdadera pregunta que debemos hacer, es ¿qué va a pasar si los precios del petróleo disminuyen?”.

Para el nuevo año, se prevé que la inflación se acerque al 26%, mientras en el área de alimentos podría incluso llegar al 30%. “El sector privado no sacrifica su margen de ganancia. Esta actitud probablemente tendrá que cambiar ante los ajustes cambiarios que se avecinan”.

Finalmente, Oliveros señaló que si el Gobierno encuentra otra forma de superar la escasez de alimentos, no va a devaluar la moneda.

Negociaciones colectivas

A pesar de la difícil situación que atraviesa el país, para la asesora estratégica de Telefónica Internacional S.A., Arelis Díaz, el país aún tiene muchas oportunidades de crecimiento.

Durante el encuentro de Venamcham, le correspondió disertar sobre las Negociaciones colectivas en entornos desafiantes.

La especialista comenzó por decir que para evolucionar en el tiempo, las empresas necesitan aceptar la realidad y convencerse de las oportunidades de mejora. “Ante un proceso crítico, debemos implementar una estrategia”.
Un líder creíble, agregó, debe ser reconocido por los trabajadores como una persona íntegra, con habilidades y capacidades.

Además, debe buscar la cercanía con las personas a través de una actitud de escucha. “Por años me desempeñé como directora de Recursos Humanos de la empresa Telefónica en 14 países. Por experiencia propia puedo decirles que el éxito depende del grado de confianza que tienen los trabajadores en la empresa, de la confianza en las relaciones y el producto que se ofrece”.

El modelo de cercanía implica la activación de los líderes en todos los rincones de la empresa, haciendo a los trabajadores protagonistas del proceso. “¿Cómo logramos esto?, tomándolos en cuenta y reconociendo su importancia”.

Cuando se trata de la negociación de una convención colectiva, es necesario tener objetivos claros. “Además, no podemos trabajar separados. Tenemos que trabajar en un sistema de Gobierno, donde todos conozcan en qué consiste la negociación”.

Finalmente, Díaz destacó que el ambiente de trabajo debe ser coherente con el discurso. “Si decimos que estamos en crisis, no podemos ver ejemplos de derroche. El vínculo de confianza debe protegerse por encima de todas las cosas”.

Estado Comunal en construcción

Una realidad ineludible es la instauración del Estado Comunal, como proyecto bandera del presidente Chávez a lo largo de sus 14 años de mandato.

Es un hecho. Las leyes e instituciones del país han orientado su vocación hacia el Estado Comunal, caracterizado por la transferencia de competencias a los consejos comunales y unidades de batalla a lo largo y ancho del país.

Sobre este tema, la economista Claudia Curiel, explicó las exigencias de este modelo en la empresa privada.

Curiel comenzó por explicar que el Estado Comunal es un proyecto que se inició con la Agenda Alternativa Bolivariana, diseñada en 1996. “El Proyecto Nacional Socialista tiene este mismo esquema y el respaldo de 42 mil consejos comunales y otras muchas organizaciones”.

Con respecto a la figura de los Consejos Socialistas de Trabajadores, la especialista aclaró que su rol dentro de la empresa no es representar a la clase obrera, sino fungir como actores políticos del Poder Popular.

“El Estado comunal es muy complejo pero ya está en desarrollo. Las leyes de Indepabis, del sector bancario, turismo, educación, entre otras, se adaptan perfectamente a este modelo”. Curiel agregó que los venezolanos no fueron consultados sobre la implementación de este proyecto político. Sin embargo, el Gobierno va a toda marcha hacia su consolidación.

Fotos: Rinolfo Quintero

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