En la urbanización Pepi Montes de Oca, del caserío Las Tunas, al norte de la ciudad, las personas están consternadas por la desaparición de una niña de apenas nueve años, quien fue vista por sus seres queridos por última vez, a las ocho de la noche del viernes, en las adyacencias de su residencia.
Vecinos comentaron que la pequeña se encontraba en compañía de un amigo de confianza que vive frente a su casa.
Él, en ese momento, se desplazaba en bicicleta y presuntamente conversaba con la menor, pero después de varias horas que los padres notaron la ausencia, comenzaron a buscarla desesperadamente por la extensión de terreno, sin tener resultados.
Extraoficialmente, se conoció que en horas de la mañana de ayer los parientes, junto a los habitantes del sector, funcionarios del Cuerpo de Bomberos y Protección Civil, reanudaron la búsqueda.
En el transcurso del día intensificaron las acciones y la única pista encontrada fue una chancleta, también algunas prendas de vestir, más una estampita de la Divina Pastora.
La comunidad realizó el hallazgo en los alrededores de una granja de pollos, donde al parecer labora como vigilante el individuo con quien estaba antes de desaparecer.
Una fuente, quien prefirió reservar el anonimato, reveló que el “allegado” participó en las labores de rastreo, sin embargo, en la mañana de ayer desapareció por lo cual muchos suponen que debe estar involucrado en la pérdida de la infante.
Será hoy que los seres queridos de la pequeña ofrezcan más detalles sobre este caso.
Foto referencial. Archivo
