El Deportivo Lara disputó un amistoso con Policía de Lara, vecino de ciudad y que hace vida en la segunda división, para probar el esquema táctico y tomar ritmo de cara al partido contra Trujillanos, a realizarse este domingo en Valera, en la quinta jornada del torneo Clausura.
El resultado final fue empate a un gol. Armando Maita, titular en el anterior encuentro de liga frente a Carabobo, anotó la diana del cuadro rojinegro, tras rematar de cabeza un servicio de Ely Valderrey, mientras que el juvenil José Ramos colocó el tanto del club uniformado.
Para el conjunto de Rafael Dudamel el tope fue de mucha ayuda, porque el club mantuvo el ritmo de juego, después de no jugar en la anterior fecha por el accidente de tránsito que sufrieron algunos jugadores de Estudiantes de Mérida, además que le ayudó a definir la formación abridora para el venidero careo, ya con un juvenil en la nómina, debido a que se reactivó la norma del sub20 obligatorio, algo que para el DT rojinegro no es problema, porque dispone de al menos cinco futbolistas de talento y calidad para escoger.
“Se viene un partido duro por las características del equipo (Trujillanos) y de su técnico y pese a que ellos no pasan por un buen momento no deja de ser un rival fuerte, pero con mucho respeto buscaremos hacer las cosas a nuestra manera, sin perder la identidad y el sostenimiento de la pelota nos enfocaremos para buscar el triunfo”, señaló Renzo Zambrano, llamado a tomar mayor protagonismo y responsabilidad en el elenco crepuscular, tras el préstamo de Marlon Fernández al Deportivo Pasto colombiano por el periodo de un año.
La tropa crepuscular va a una plaza que tradicionalmente le ha sido difícil –sin contar aquella fecha en la que ganó con puros juveniles por el paro de los profesionales ante las protestas que habían en las calles del país- pero se va a encontrar con un Trujillanos que, golpeado por las notables bajas, no es el mismo del anterior semestre, aquel que alcanzó el título, y acumula apenas un punto de doce posibles. La meta del club guaro es aprovecharse del mal momento del rival y sacar una victoria que le permita ganar posiciones en la clasificación.
