¿Cuántas máscaras, cuántas mentiras?

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Al diputado Guillermo Palacios, decoroso parlamentario que ha consagrado desvelos a este tema, dedico

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Hace tiempo leí un proverbio judío. Decía, palabras más, palabras menos, que con una mentira puede irse muy lejos, pero sin esperanzas de volver.
Cierto, quien miente puede salirse de un aprieto, o meter en problemas a los demás para salvarse él, y ganar consideración, o aplausos. También apelan a la mentira quienes se sienten movidos por la piedad, y tratan de evitarles a otros un dolor. En ocasiones, incluso, la verdad pareciera no poseer ningún valor, como el hecho de decirle a un moribundo cuan cerca está de la muerte. A veces se dice la verdad en forma cruel. No por honrar la verdad, sino por el dolor que esa verdad provoca en el otro. Se ha escrito que lo primero que muere en una guerra es la verdad, y la historia está preñada de ejemplos. Los políticos estiman asimismo la demagogia, la mentira, como parte de su oficio, cuando perciben que con la verdad no llegarán muy lejos. Es más, Jean-François Revel plantea, en El conocimiento inútil, que «la primera de todas las fuerzas que dirigen el mundo es la mentira».
Pero así como según Aristóteles, el castigo del embustero es no ser creído, aun cuando diga la verdad, en uno de sus más recientes ensayos Umberto Eco advierte que incluso los moderados reconocen que hay límites en las mentiras políticas que puede soportar una sociedad. Se pregunta «¿qué pasa, entonces, cuando un político miente sistemáticamente, sin temor a que sus mentiras puedan contradecirse entre sí?», para citar enseguida un panfleto de 1712, de Jonathan Swift, para quien un mentiroso político «debe tener una corta memoria», a modo de no recordar cómo se contradice a sí mismo.
Swiff hace referencia en su escrito s un «cierto gran hombre», embustero hábil, manipulador innato, con un «fondo inagotable de mentiras políticas, que distribuye abundantemente cada minuto que habla y que, con una generosidad sin paralelo, olvida, y en consecuencia contradice, durante la siguiente media hora».
Los larenses lo acabamos de presenciar, en primera fila. El candidato a la perpetuidad vino el pasado sábado. Después de desfilar en su carroza, muestra de su primera mentira, pues es sólo un parapeto que trata de ocultar sus limitaciones, dijo, sin ningún empacho, que aquí su revolución ha sembrado una obra deslumbrante. En una avenida arreglada y adornada el día anterior, segunda mentira, tapizada de largo a largo con sus afiches por los organismos del Estado, tercer engaño, y ante un público transportado por Pdvsa desde los más remotos confines del país, pintó un mundo idílico que sólo la mentira oficial trata de sostener.
Dijo que, palabras textuales, el Sistema Integral de Transporte Masivo de Barquisimeto (Transbarca) «está casi listo para arrancar la primera etapa». Es cuestión de semanas, aseguró. Al propio tiempo, «otros proyectos» harán el milagro de «enlazar la autopista que viene de Acarigua-Barquisimeto con la autopista de San Felipe». ¡Fabuloso! Pero el plato mayor fue, sin duda, el proyecto Yacambú. El túnel ya está listo, hizo la revelación. Quizá le falta algún retoque, algún detallito menor. El sediento valle de Quíbor, expuesto todos estos años a la amenaza de una intervención masiva, con sus productores desprotegidos tras la expropiación de Agroisleña y Tracto América, y sometidos, encima, a los controles y a los golpes de la importación indiscriminada de los rubros que ellos cosechan con grandes esfuerzos, todo ese valle, dijo, está a punto de explotar en un maravilloso emporio agroindustrial que sólo es posible en revolución. No habrá mercado capaz de absorber las inacabables hileras de gandolas que saldrán de Quíbor colmadas de cebolla, tomate y pimentón, cuya producción se multiplicará por cuatro y será
excedentaria. ¿Cuándo? ¡En breve!
Todo, milimétricamente calculado. A partir del invierno del año 2013 se comenzará a llenar la represa de Yacambú. «En 2014 debemos abrir el chorro». Le faltó aclarar si en la mañana o en la tarde, pero de una vez Barquisimeto podrá contar con los 3.000 litros de agua por segundo que ahora le faltan. Esa agua vendrá de Yacambú, trabajos que pese a su complejidad y altos requerimientos financieros, no impiden que simultáneamente en Lara se ejecute a toda marcha otro conjunto de obras: autopistas, ferrocarriles, hospitales, Centro de Alta Tecnología, distritos motores de desarrollo integral, plantas procesadoras de frutas y tubérculos, de leche y carnes. Y todo eso programado para inaugurarlo «pronto». ¿No se han fijado que la obra del Gobierno apunta siempre al futuro, a la promesa reciclada? Incluso, el señor pasado se ha permitido la desfachatez de proclamar a los cuatro vientos que es «el hombre del futuro».
Pero no sólo este proyecto se ha visto enlodado por denuncias de corrupción, contratación de empresas de dudosa reputación, como una colombiana, envuelta en su país en gruesos escándalos, y por informes técnicos que hablan de evidentes fallas en el desarrollo de la obra, manifestadas, por ejemplo, en la fisuración de la losa de concreto en la presa, grietas que pueden ser aceptables para edificaciones, pero no para una estructura de retención de agua. Se ha obviado que sólo el llenado de la presa se lleva por lo menos dos años. Otra obra complementaria en la que poco se ha avanzado es la instalación de las tuberías.
Algún valor debe tener la palabra, y más cuando procede de quien gobierna a una nación y aspira a seguir gobernándola. En su Aló Presidente número 148, trasmitido desde la represa de Yacambú, el domingo 4 de mayo de 2003, el candidato a la perpetuidad dijo que los trabajos avanzaban con «rapidez» y ofreció la obra para inaugurarla en «poco más de tres años». Es decir, en 2006. Así lo precisó: «Estamos avanzando a buen pie, a buen paso, para inaugurarla a finales del 2006».
No obstante, está registrado que en un Aló Presidente, desde Cuara, municipio Jiménez, el 9 de octubre de 2005, dijo que el proyecto Yacambú-Quíbor «terminará antes de 2010».
En su Aló Presidente número 316, desde Caicara del Orinoco, estado Bolívar, el domingo 3 de agosto de 2008, cuando Quíbor cumplía 338 años de su
fundación, hubo un pase en vivo hacia el portal de salida del embalse, con el entonces gobernador del estado Lara, Luis Reyes Reyes, quien pronosticó que «el agua debe estar llegando tanto al sistema de riego como al sistema de potabilización, a partir del primer mes de enero 2011».
La seriedad del tema fue matizada por el Presidente, ese día, desde su Aló, con aquella célebre narración de la ocasión en que, mientras estaba en el túnel del ferrocarril Caracas-Tuy, en cadena, y «yo andaba con un cólico, compadre, es decir tenía diarrea». Porque, aclaró: «Yo soy un ser humano como cualquiera de ustedes, a veces la gente se olvida de eso, ¿no? (…) El túnel, ¿dónde me paro yo, en un túnel, a hacer lo que tenía que hacer?»
Más tarde, cuando faltaba poco para las elecciones parlamentarias de septiembre de 2010, vino a Lara y aseguró que la presa de Yacambú estaría lista a finales de 2011 y que en enero de 2012 el agua llegaría a Barquisimeto.
Ahora, el sábado de la semana pasada, inmerso en otra campaña electoral, viene y larga que «en 2014 debemos abrir el chorro».
Creo que fue Pope quien habló sobre el enredo en que de continuo se ve el mentiroso profesional. Quien suelta una mentira, dice, estará obligado a inventar veinte mentiras más, para sostener la certeza de la primera. Lo peor de todo es cuando la mentira no es para salvarse sino para hundir. Lo serio es cuando hay un especial gozo en embaucar, en manipular, en confundir. Lo grave es cuando la recurrencia a escudarse en la mentira se convierte en una enfermedad, llega a formar parte de una patología. Lo inmoral es cuando se larga la mentira, aún a sabiendas de que es mentira. Lo perverso es cuando la mentira, lejos de ser un ejercicio piadoso, garantiza un negocio político: la permanencia en el poder. Lo triste es cuando la víctima de la mentira es un pueblo engañado, cuando se explotan sus necesidades y esperanzas. Lo realmente alarmante es cuando una sociedad, o buena parte de ella, no muestra el anticuerpo elemental ante la descarada mentira del mentiroso. Cuando la mentira puede reinar, infinitamente, y gritar sus burlas, enrollarse y volver a ser desplegada, una vez, otra, sin que el colectivo dé muestras de entender el peligro que amenaza al individuo, ni reaccionar ofendido. Cuando la mentira se traduce en atraso, dolor, violencia, ruptura y desgracia para un país que presencia, paralizado, cómo se troncha su presente y se compromete su futuro, en los altares de un delirio miserable.

Repiques

Esta caricatura pertenece a la polaca Pawla Kuczynskiego, nacida en 1976. Desde 2004 produce ilustraciones satíricas, sobre temas sociales, y ha recibido 92 premios y distinciones

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«Cuando advierta que para producir necesita obtener autorización de quienes no producen nada; cuando compruebe que el dinero fluye hacia quienes trafican no bienes, sino favores; cuando perciba que muchos se hacen ricos por el soborno y por influencias más que por el trabajo, y que las leyes no lo protegen contra ellos sino, por el contrario, son ellos los que están protegidos contra usted; cuando repare que la corrupción es recompensada y la honradez se convierte en un autosacrificio, entonces podrá, afirmar sin temor a equivocarse, que su sociedad está condenada.» Ayn Rand (1950)

Leído en Twitter:
@JoseAGuerra: «Conductores que manejan entre Maracay y Valencia, pendientes que en el país aspirante a potencia energética el túnel La Cabrera no tiene luz»
@JoseAVega: «Uno camina. El otro en carroza. El primero está. El segundo pasa. Uno de llegada. Otro de salida. Viene el cambio»
@EnoeAlvarez: «En referencia a su columna y al apellido Batman, ese es un apellido común entre la comunidad árabe del estado Aragua»
«@guaji85: «En visita de Chávez, PSUV dijo tener 13.015 patrullas. 13.015 X10 (1X10): 130150 votos. Dato: oposición 2010: Total: 425.510 votos»
«@doctordevries: «El venezolano pareciera haber bajado su sensibilidad pero afinado su sentido psicológico (perspicacia)»

La encuestadora GIS XXI, del ex ministro Jesse Chacón, arroja 34,8 puntos de diferencia a favor de Hugo Chávez, mientras que Hinterlaces reduce esa ventaja a 21%. Al contrario, Consultores 21 asegura que Chávez y Henrique Capriles Radonski están igualados en 46% de preferencia.

Era un secreto a voces, pero entre los atletas que viven en la Villa Olímpica, hay más que conversaciones deportivas. La bella Hope Solo, guardameta de la selección de Estados Unidos, considerada la mejor arquera del mundo, declaró: «Los atletas son extremistas. Cuando entrenan, entrenan al máximo. Cuando salen a beber, beben 20 copas. Como es una experiencia única, todos quieren tener muchos recuerdos, ya sean sexuales, en las fiestas o en las competiciones. He visto gente tenido sexo en la hierba que hay entre los edificios».

La semana pasada les hablé de la cédula de identidad de la señora Batman de Batman en el Registro Electoral. Ahora les pido que introduzcan las siguientes cédulas en la página web del CEN (cne.gov.ve): V-24234355, E-166485 y V-6160752. ¡No lo podrán creer!

Otros comentarios generosos, que agradezco profundamente: «Mi capacidad de análisis ya no me permite afirmar cuál de las Campanas es mejor que otra. Todas son extraordinarias. ¡Dios lo cuide!» Orlando Méndez
«Muchas gracias por esos certeros campanazos. Veremos el fruto de haberlas echado al viento con tanto coraje y amor por la patria». Amanda Victoria
«Usted desnuda la realidad en la cual vamos caminando. Que Dios lo cuide». José R. Sánchez A.
«Sus argumentos y sus repiques son un compendio fervoroso sobre la realidad y democracia venezolana. Dios lo continúe bendiciendo y gracias por representarnos tan valiente y dignamente en el discurrir democrático». Cariñosamente, María Elena Sira

«No existe nada en el mundo que esté completamente equivocado. Hasta un reloj parado consigue acertar la hora dos veces al día». Pablo Coelho

Esto me escribe Octaviano Quiroz Hernández: «En la misma línea temática que abordas en tu columna de hoy, quisiera referirme al uso indebido de recursos físicos, financieros, y de talento humano que, en el marco de esta campaña electoral, vienen haciendo algunas instituciones de Estado en Lara. Específicamente, Corpoelec y Sistema Hidráulico Yacambú-Quíbor, aunque me atrevo a pensar que no son las únicas. En varios lugares de Barquisimeto y de Lara en general han sido vistos vehículos y personal de esos entes colocando afiches alusivos al candidato del gobierno. Entiendo que esto es delito, y que lamentablemente es un mal de muy vieja data en el país; sin embargo, siendo que el presidente Chávez llegó a ese cargo bajo promesas de acabar con la corrupción y demás tumoraciones morales que caracterizaban a la mal llamada «cuarta república», ¿cómo es que repite con mayúsculas tales errores?»

«La mano que te da una rosa siempre conserva una parte de su fragancia». Proverbio chino

Fernando Segnini fue nombrado, por unanimidad, Coordinador de Medios de la Mesa de la Unidad Democrática del estado Lara. Me parece un acierto.

En Japón se prueba un nuevo sistema educativo, con un cambio conceptual que rompe todos los paradigmas. El programa, de 12 años, tiene cinco materias y forma a los niños como «ciudadanos del mundo». En esas escuelas no se rinde culto a la bandera, no se canta el himno, no se vanagloria a héroes inventados por la historia. Los alumnos ya no creen que su país es superior a otros por el solo hecho de haber nacido allí. Ya no irán a la guerra para defender los intereses económicos de los grupos de poder, disfrazados de «patriotismo». Entenderán y aceptarán diferentes culturas y sus horizontes serán globales, no nacionales. A los 18 años los jóvenes japoneses hablarán cuatro idiomas, conocerán cuatro culturas, cuatro alfabetos y cuatro religiones. Serán expertos en uso de sus computadoras. Leerán 52 libros cada año. Respetarán la ley, la ecología y la convivencia. Y manejarán la aritmética de negocios al dedillo.

Ilustración: Omar David Suárez

 

 

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