Pedro Troconis, abogado especialista en el ámbito penal, explicó que la aparición de grupos armados que defienden un ideal político y , además, cuentan con “libertad” para cometer crímenes sin el temor a la consecuencia, es el inicio de “guerrillas urbanas”.
Según el especialista en Derecho, estos grupos de personas unidas para cometer actos delictivos y hechos violentos, no cuentan con preparación militar pero sí con armamento que les fue proporcionado por el Gobierno nacional para defender un ideal político. Sin embargo, con el paso del tiempo y la justificación de algunos hechos delictivos, dichos colectivos fueron tomando poder a tal punto que, sugiere Troconis, “se les ha escapado de las manos”.
Para el abogado, la serie de eventos que proporcionaron un estado de impunidad para dichos grupos armados fueron las invasiones de terrenos privados; posteriormente, durante los hechos del 11 de abril del 2002, estos mismos grupos usaron sus armas para hacer frente “a personas desarmadas” de la oposición. Y, por último, otro acto que ocasionó esta sensación de impunidad en los colectivos, explica Troconis, ha sido el enfrentamiento entre miembros de dichos grupos contra manifestantes en los hechos de principio de año.
Para el abogado, la primera evidencia de que dichos grupos se encuentran al margen de la ley es el porte ilícito de arma, que provoca una instigación para que dichos sectores de la población cometan delitos. “Esto pone a pensar a las personas que pueden cometer hechos delictivos y que tendrán impunidad”. Además, dichos grupos podrían ser acusados del delito de agavillamiento, asociarse para delinquir, “y que ha sido imputado a muchos de los estudiantes detenidos en las protestas”.
De igual forma, existen delitos a los cuales se les pudiera imputar y que están previstos en el Código Orgánico Procesal Penal, “y que fueron cometidos con el justificativo de defender las ideas políticas”.
Para Troconis, lo que ha sucedido durante los últimos días, es que “se les está revirtiendo la situación y ya no pueden controlar a estos grupos”. Recordó las palabras del líder del colectivo 5 de marzo, José Odreman, quien inculpaba al ministro Miguel Rodríguez Torres, “de todo lo que le pasaba”.
“Se dieron cuenta que los grupos no están hechos para defender las líneas ideológicas, sino que participan en comisiones de delito”, dijo el abogado. “Es grave cuando la persona llega a pensar que lo que está haciendo está bien”.
Por último, Troconis indicó que el Gobierno nacional y sus autoridades tendrán que “hacer conciencia, y reconsiderar y corregir los errores”.
