Existen fechas que son anheladas por todos, tal es el caso de los quince de cada mes. Para algunas personas, este día representa felicidad, mientras que para otras se traduce en una verdadera calamidad.
Cada mes, los adultos mayores se exponen a diferentes penurias en el intento de cobrar su pensión de vejez.
Los abuelitos madrugan para quedar dentro de los primeros puestos de la cola. Permanecen largas horas de pie, bajo un inclemente sol o por lo contrario, se mojan ante las sorpresivas lluvias.
Adicionalmente, se encuentran imposibilitados para hacer sus necesidades fisiológicas en el momento que lo requieren por la ausencia de baños.
Muchos de ellos, incluso, asisten enfermos a las entidades bancarias por la misma necesidad de obtener el dinero para comprar sus medicinas o alimentos.
Esta triste situación afecta a miles de adultos de la tercera edad a nivel nacional. Algunos de los consultados, manifestaron estar totalmente en desacuerdo con el proceso que lleva a cabo el Gobierno nacional para el pago de las pensiones.
Coinciden las reacciones
“Es injusto y hasta inhumano las calamidades que tenemos que vivir los adultos mayores para recibir nuestro dinero. Urge que se analice el proceso para nuestro pago. Los gobernantes deben crear y planificar nuevas estrategias para evitar que tengamos que sufrir todos los quince de cada mes”, expresó Mauro Rodriguez (74), quien se encontraba realizando su cola desde muy tempranas horas de la mañana.
Por su parte, María Moreno (64), indicó: “No puede ser posible que nosotros, quienes trabajamos toda una vida, tengamos que pasar por esta terrible situación todos los meses. Debe existir alguna alternativa mucho más eficaz y menos perjudicial para todos los adultos mayores. Los abuelos deberíamos tener privilegios para obtener nuestro pago. Aquí a más de uno se le parte el corazón viendo cómo tantos ancianos sufren al estar de pie durante tantas horas”.
De igual forma, Rafaela Rivero (79), manifestó su inconformidad. “Cada mes vengo desde Carora hasta acá para solicitar mi dinero, el cual requiero para comprar mis medicamentos. Esta situación es muy lamentable. ¿Cómo es posible que nosotros tengamos que pasar por esto?. No tenemos ni siquiera donde sentarnos y desconocemos cuánto tiempo más tendremos que esperar de pie para ser atendidos”.
El resto de los entrevistados coincide en afirmar que el Gobierno regional debe buscar una solución “inmediata” al respecto.
Entre algunas de las exigencias se encuentran, en primera instancia, disponer de una gran cantidad de sillas en la parte exterior de las entidades bancarias que fueron destinadas para el pago de las pensiones.
En segundo lugar, habilitar baños portátiles y colocar diversos toldos que los protejan del sol o del agua en caso de lluvia.
Por último, sugieren que se diseñe un sistema automático digital que facilite el proceso de atención de los pensionados.
Exigen seguridad
Los abuelitos sostienen se sienten inseguros al momento de cobrar su pensión en los bancos. Exhortaron al gobernador Henri Falcón para que designe una comisión de los organismos de seguridad, para que se encargue de resguardar de manera permanente la integridad de los adultos mayores los días de cobro.
