La salud del presidente Hugo Chávez, empeoró tras presentar una «nueva y severa infección» respiratoria, informó este lunes el gobierno, que asegura que el estado clínico del mandatario «continua siendo muy delicado».
«Al día de hoy existe un empeoramiento de la función respiratoria relacionado con el estado de inmunodepresión propio de su situación clínica», leyó el ministro de información Ernesto Villegas de un comunicado, en una transmisión obligatoria por todos los medios.
«Actualmente presenta una nueva y severa infección», agregó el ministro, desde el hospital militar de Caracas, donde está internado Chávez.
Familiares del mandatario y miembros de su gobierno enviaron mensajes de solidaridad por las redes sociales, mientras las etiquetas #fuerzachavez y #vivirasyvenceras se replicaban en Twitter.
«Todo mi Amor para ustedes! Seguimos aferrados a Dios! Gracias por los mensajes de solidaridad! #momentodeoracion Venceremos! Con Dios siempre!», tuiteó la hija del mandatario María Gabriela Chávez, bajo el usuario @Maby80.
«Dios bendiga y proteja al Comandante Chávez», escribió por su parte, la ministra de Asuntos Penitenciarios, Iris Varela.
Chávez cumplió este lunes dos semanas de su sorpresivo regreso al país suramericano, tras permanecer más de dos meses en Cuba, donde fue operado en diciembre por cuarta vez contra un cáncer detectado en 2011.
El mandatario es sometido a sesiones de «quimioterapia de fuerte impacto, entre otros tratamientos complementarios», señaló Villegas, confirmando lo dicho por el vicepresidente Nicolás Maduro el viernes.
«La evolución de su cuadro clínico continúa siendo muy delicado», añadió.
Tras la cirugía, Chávez, de 58 años y en el poder desde 1999, ha persistido con problemas respiratorios, que se han agudizado con los días.
El 15 de enero, el gobierno informó que el gobernante debe respirar con la ayuda de una cánula traqueal y tiene dificultades para hablar. Seis días después, la evolución de su estado de salud no era favorable, según el anterior parte médico difundido entonces.
Pero el gobierno venezolano mantiene que Chávez sigue al mando del país y desmiente rumores de desestabilización de Venezuela, el país con las mayores reservas de crudo del planeta.
Este lunes, Villegas acusó a «laboratorios extranjeros» y la «derecha venezolana» de desplegar una «guerra psicológica» para «generar escenarios de violencia como pretexto para una intervención extranjera».
El gobierno «repudia la actitud farisea de aquellos enemigos históricos de Hugo Chávez, que siempre le han prodigado odio, insultos y desprecio y que ahora tratan de utilizar su situación de salud como excusa para desestabilizar» a Venezuela, leyó el responsable, sin dar detalles.
Unas horas antes, la Guardia de Honor presidencial activó una nueva escuadra de tanques Dragón 300, según imágenes difundidas por el canal oficial VTV.
«Pase lo que pase siempre Chávez va a ser para nosotros un ‘con Chávez todo, sin Chávez nada», dijo el general José Ornelas, comandante de este componente, encargado de la seguridad del mandatario y comandante en jefe de las Fuerzas Armadas venezolanas.
Luego de su regreso de Cuba, el misterio sobre la salud de Chávez se mantiene tan impenetrable como antes. No hay testimonios gráficos de su estadía en el país, y desde su prolongada convalecencia, el gobierno solo ha mostrado fotos suyas una sola vez.
El gobierno pide que se deje al mandatario «tranquilo» mientras recibe su tratamiento de quimioterapia, dijo recientemente el canciller Elías Jaua.
Por su parte, los opositores exigían este domingo «la verdad» sobre la salud de Chávez durante una marcha hasta el lugar en Caracas donde unos 50 jóvenes están encadenados desde el martes, para exigir que el mandatario aparezca públicamente o renuncie, si no está en capacidad de seguir gobernando.
