Buzón vecinal

-

- Publicidad -

¡Ciudad Verde…?
Es necesario felicitar al alcalde por ese eslogan de Ciudad Verde , que esperamos que en el tiempo se concrete, promueva, financie y sea el estímulo necesario para que las organizaciones comunales y vecinos organizados, puedan ser parte de una urbe medianamente vivible y sustentable en su ecología y espacios de recreación, áreas verdes y sin contaminación, por ahora la constante es y ha sido el podar, talar y envenenar la arte arbórea de nuestra ciudad, algunos con el pretexto de hacer visibles sus negocios y vidrieras, otros más para instalar tarantines y fritangas en aceras y espacios de los peatones, y la municipalidad debe hacerse un “mea culpa”, pues al parecer no tiene ecologistas y urbanistas que asesoren al despacho del burgomaestre y los organismos y direcciones que les compete la materia de salud ambiental y han permitido que se inunde y masifique los espacios de vegetación con variedades de plantas ajenas a nuestro ecosistema como el nin y el evergreen (siempre verde), que son causantes del lamentable deterioro de las aceras, cloacas y vías peatonales. Estará en cuenta usted señor alcalde.
Por otro lado, notamos que árboles como el araguaney, cují, úbeda, yabo, guayaba, vera y semeruco, no son conocidos en la actualidad por los jóvenes y en todo caso algunos solamente por fotos, que pena para los organismos oficiales y organizaciones ecológicas, nadie se ocupa de la preservación y conservación de estas especies, y en sumo grado es vergonzante que en las escuelas no se siembre por lo menos una planta de araguaney, el árbol nacional, si no ponemos amor a la ecología, a la preservación del ambiente, al armonía de la ciudad , nos quedaremos en algo tan ecológico como “hablar paja, o gamelote”.
No podemos quedarnos en la mera lamentación o crítica, debemos proceder a implementar viveros comunales, donde germine la nueva tipología arbórea, que requiere nuestro municipio y que en manos de los vecinos se concretara la predica aquella de “amar es querer”, así mismo estas variedades son del semiárido larense y plantas nobles por lo que debemos execrar aquella política errónea de sembrar “árboles de montaña” en nuestro hogar común, causante de los daños y estragos que hemos visto recientemente en nuestra ciudad. La predica es manos a la obra “al árbol debemos solicito amor”.
“Quien a buen árbol se arrima, buena sombra lo cobija”

[email protected]

- Publicidad -

Pulsa aquí para apoyar la libertad de expresión en Venezuela. Tu donación servirá para fortalecer nuestra plataforma digital desde la redacción del Decano de la Prensa Nacional, y así permitir que sigamos adelante comprometidos con la información veraz, como ha sido nuestra bandera desde 1904.

¡Contamos contigo!

Apóyanos aquí

- Publicidad -
Artículo anterior
Artículo siguiente

Más leido hoy

- Publicidad -

Debes leer

- Publicidad -
- Publicidad -