Al gobierno no le conviene martirizar a Leopoldo López

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A juicio del abogado constitucionalista, Joel Rodríguez Ramos, la posible condena de 13 años de prisión para el dirigente de Voluntad Popular, Leopoldo López, es absurda, puesto que no existen tales delitos. “Se están violentando sus derechos. Tiene más de un mes preso siendo inocente y eso es convertirlo en un mártir”.

Para Rodríguez Ramos está sería la peor situación que podría enfrentar el gobierno, ya que López se está convirtiendo en símbolo de resistencia y mártir por la libertad de Venezuela.

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Comenta que los delitos de los cuales se le culpa son imposibles de comprobar, ya que el dirigente de Voluntad Popular sólo hizo ejercicio de su derecho a la protesta.

“Su única responsabilidad es haber tenido éxito en una convocatoria constitucional, que a casi dos meses de su inicio, continúa vigente”, señaló.

Respecto a los delitos que se le imputan destacó que no existe instigación alguna puesto que López sólo hizo una convocatoria a protestar. Señaló como ejemplo de instigación el llamado a “ataque fulminante” que hiciera el gobernador de Carabobo, Francisco Ameliach, el mes de febrero.

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Sobre la acusación de daños a la propiedad pública en grado de determinador, recordó que para el momento de los enfrentamientos del 12 de febrero, López ya se había retirado del lugar.

“Tampoco se le puede acusar de incendio en grado determinador porque nunca dio la orden de incendiar algún bien, sólo a la protesta”, expresó

Acerca del delito de asociación para delinquir recordó que López representa un partido político, cuya conformación está basada en los estatutos del Consejo Nacional Electoral, (CNE) y se rige por la Ley de Partidos Políticos.
“Los partidos se constituyen para propagar sus ideales políticos y conseguir adeptos para llevar a sus candidatos al poder, no para delinquir”, manifestó.

En este sentido, Rodríguez Ramos contradice lo dicho por algunos especialistas que han querido llamar la posible condena como exagerada.

No existe delito y por tanto exageración. “No hay punto límite que sobrepasar. No hay exageración, sino una condena injusta”.

Para Rodríguez Ramos, la captura de López es un pase de factura por ser adversario al gobierno.
Ahora le corresponde apegarse a recursos legales como la apelación y acudir a instancias internacionales por violación a los derechos humanos.

Añadió que el encargado de la presidencia de la República, Nicolás Maduro, debería frenar la escalada de violencia, que no ha hecho que cesen las manifestaciones, sino por el contrario, ha provocado la intensificación de las mismas. “Han querido apagar el fuego con gasolina”, remarcó.

 

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