A la memoria de Betsabé

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Hermana querida:

Ahora que ya no estás, la amargura no está en dejar de verte, está en la ausencia que nos dejas en el alma.
…Te libró de las tinieblas y sombras de la muerte que te mantenían afligida; clamaste a Dios en medio de tus cadenas, angustias, tribulaciones y tu grave enfermedad. Te escuchó y te ha liberado. En su infinita misericordia convirtió el huracán que te azotaba en viento suave y todo se calmó.Te deseo y repito hoy la expresión del poeta Mutis: “Que te acoja la muerte con todos tus sueños intactos, esa que se confundirá con tus sueños, en los que reconocerás los signos que antaño te fuera dejando, como un cazador que a su regreso reconoce sus marcas en la brecha”

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Para tu hijo Miguel Ángel este mundo es bonito sabiéndolo vivir. En efecto, pero no todos nacen para ser felices en una tierra tan indiferente, dispareja y egoísta. Los años corren a millón sin dar oportunidad a muchos de poder disfrutarlos a plenitud. Te fuiste cuando en la estación rebosaban hermosas las flores de azalea.

Qué pronto se hizo mañana en el albor de nuestra vida de niñas y se nos volvieron azules los sueños, qué pronto nos fuimos del nido y también nuestras liras, travesuras, carcajadas y flautas queridas,quedando tan solo en las ramas del hogar el trinar, los recuerdos y la dulzura de las aves que ayer emigraron y más nunca volvieron. Te nos adelantaste, has acabado con el tiempo de los encuentros que nunca se dieron. Te vas con tu morral de sueños llevada por la brisa, dejando atrás tus polluelos ya crecidos y tus truncadas alegrías, se cerró el último capítulo de tu vida. Sabemos que volveremos a verte solo a través de la alquimia de la muerte.

Naufragó tu velero ante la sorpresiva tormenta,todo tu cuerpo crujió, se rasgaron tus velas, tus mástiles y tus jarcias, tus huesos, tus músculos y tu piel,se descompuso tu bello rostro y todo lo que sostuvo tu vida… Atrás muy atrás quedaron tus esperanzas detenidas como flor de siempreviva a la vera del camino. Tristes doblaron las campanas sobre el corazón de los que mucho te amamosal paso de tu féretro.

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Para ti ya el tiempo no tiene importancia, ni los dolores, ni la prisa del viento, de las células, los nervios ni tus eternas búsquedas. Nada ni nadie podrán dañarte, como tampoco podrá quitarte ya nada la muerte.

Abollado por las tormentas que te dio la vida, cansado de navegar partió inmortal tu velero, mecido por la brisa y soplos de la paz rumbo a nirvana.

Quise hacerte un poema de fecunda esperanza, inspirada en el paisaje de la niñez y juventud que aunque pobre no pudo haber sido mejor ni más feliz… Miro el camino silente a la distancia y se me antoja un crucigrama de vías que aunque iban a muchas partes, sin compasión lejos nos llevaron.

Hace tiempo el hogar de los viejos atrás se quedó, quedándonos de ellos el fulgor de sus glorias, su gran humildad, su gentileza, su cariño y sus ejemplos.Se separaron nuestros destinos y nos fuimos como infatigables viajeras, aprendimos a evocar el sueño de las albas, a hilvanar hilo por hilo, brizna por brizna el interior de la casa que a todas se nos fue quedando vacía, sin niños, sin alegrías, sin risas, sin prisas y sin salud también. Aprendimos a ser en nuestros sueños gaviotas en cielos sin cadenas, crecimos y algunas seguimos creciendo porque no hay aún vacío de esperanza y la lucha sigue con su motor encendido.

Deseo que se cumplan todos tus sueños allá donde no hay tiranos y todo es perfecto, allá donde podrás seguir siendo un feliz ruiseñor.

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