Ante la aprobación el pasado jueves de la Ley que Regula la Compra y Venta de Vehículos Automotores Nuevos y Usados Nacionales o Importados, en la Asamblea Nacional, comerciantes del sector automotriz en el estado Lara consideran que más allá de una nueva norma, lo que realmente es necesario solventar es la falta de disponibilidad de vehículos nuevos en los concesionarios, pues afirman que es esto lo que obliga a muchos compradores a recurrir al mercado de vehículos usados, cuyos precios suben por una relación entre oferta y demanda.
Jorge Torrealba, socio en un negocio de venta de carros usados en Barquisimeto, expresó que la nueva normativa podría ser una medida apropiada para cambatir la creciente especulación que reina en el comercio de vehículos. “Esto ocurre especialmente con los vehículos nuevos, debido principalmente a la dificultad para obtener las divisas necesarias para importar piezas y otros elementos para el proceso de ensamblaje”, señaló.
Cabe destacar que mientras se implementa la nueva ley, el precio máximo al que podrá comercializarse un carro usado, nunca podrá exceder el 90% del precio de un vehículo nuevo al 28 de febrero de 2013 del mismo modelo o similares características, estructura o diseño. Con respecto a esto, Torrealba hizo notar que con los vehículos usados es más difícil calcular los precios.
Consultado sobre la prohibición para publicar precios de vehículos a través de páginas web que no hayan sido aprobados y publicados anteriormente por el Ministerio de Comercio, el vendedor opinó que los sitios en Internet y otros medios digitales juegan un papel clave como intermediarios para los clientes.
“Sólo publican información, y no sería justo que los sancionaran por los precios que estipulan los vendedores”, comentó.
Torrealba también puntualizó que muchas personas utilizan los precios en el mercado de vehículos usados como punto de referencia antes de ir a un concesionario, donde existen dos precios, uno de lista, y otro de facturación.
En este sentido explicó que mientras el vehículos se halla en la lista del concesionario, mantiene un precio que no incluye la comisión que se cobra por la salida del carro. “Es algo que ocurre en todos los concesionarios del país”, acotó.
Por su experiencia, el comerciante precisó que ante la falta de una alternativa a la poca disponibilidad de vehículos nuevos, actualmente la proporción de larenses que recurren al mercado de carros usados podría ascender a 80%. “No hay suficientes vehículos nuevos, y muchos compradores no logran obtener un crédito para concretar la compra en un concesionario. Por lo tanto, no tienen otra alternativa más que ir a una venta de carros usados”, agregó.
